Nombres científicos de animales

Nombres científicos de animales: ¿Por qué los necesitamos?

Los nombres científicos de animales nos permiten distinguirlos sin ningún género de dudas. Los nombres comunes de los animales varían considerablemente según la zona. Aunque animales como el perro o el gato se llaman igual en todos los países independientemente de formas dialectales que puedan existir, con otros no sucede así.

Un ejemplo muy claro lo tenemos en los peces que consumimos. En las zonas con mar es habitual darles nombre a estos pescados que pueden variar incluso de pueblo en pueblo. Un ejemplo es el jurel, nombre más popular de un pez que también se conoce como jurelo, chicharro, escribano o chicharrón entre otras denominaciones. Pero su nombre científico, Trachurus trachurus, es universal y con él se le identifica en cualquier lugar del mundo. Ni siquiera importa el idioma que hablemos, ya que el nombre científico de animales es en latín para todos. Cuándo no existe un nombre en latín para la especie, se latiniza un nombre para denominarla.

Nombres científicos de animales: ¿Cómo se forman?

El nombre científico se forma con dos palabras latinas, la primera se refiere al género al que pertenece el animal y la segunda se refiere a la especie. El género engloba a animales de la misma familia que presentan una serie de características comunes mientras que la especie especifica a un tipo de animal en concreto. En ocasiones es necesaria una tercera palabra para diferenciarlos. Por ejemplo, el nombre científico del lobo es canis lupus. Canis es un género de mamíferos de la familia de los canidae, que además de a los lobos incluye a los perros, a los coyotes o a los dingos entre otros. Lupus, lobo en latín, designa a estos animales, así que canis lupus son los lobos en general. Pero si hablamos de perros, considerados biológicamente de la misma familia pero con claras diferencias, entonces serían canis lupus familiaris, es decir, una subespecie del lobo. Las subespecies se denominan pues con tres palabras latinas.

El nombre científico denomina a un taxón especie, es decir, a un grupo de animales con unas características genéticas comunes que permite clasificarlos como una misma especie. La taxonomía biológica es la ciencia que permite la clasificación en familias, especies y subespecies de los diferentes animales.

Pero, ¿quién marcó estas normas para formar nombres científicos de animales? 

Este sistema para denominar a los animales fue ideado en el 1700 por Carl von Linné, conocido popularmente como  Carolus Linnaeus, la versión latina de su nombre. Era un médico y botánico sueco que fue el primero en expresar la necesidad de que animales, plantas y minerales pudieran ser claramente clasificados y diferenciados sin género de duda e independientemente del idioma utilizado, para evitar errores en las traducciones.

Se denomina nomenclatura binominal y siempre se escribe en letras cursivas. Como hemos visto, puede ser también trinominal, cuando se trata de subespecies.

¿Tienen todos los animales su denominación cientifica?

Todos los conocidos, no obstante cada poco tiempo aparecen nuevas especies que es necesario denominar.

¿Cómo se determina que una especie es nueva y como se escoge el nombre?

Cuándo un zoólogo o experto cree haber descubierto una nueva especie lo primero que debe de hacer es extraer su secuencia genética, ya que esta será la única prueba concluyente de que se trata de una nueva especie, o quizás subespecie, no conocida hasta el momento. Una vez que se ha demostrado que no existían previamente referencias sobre esa especie, se procede a denominarla en latín moderno (es decir, en una forma latina de la palabra).

El siguiente paso es presentar al animal y los estudios realizados al resto de la comunidad científica. Cuánto más documentado tengamos todo, más posibilidades hay de un rápido reconocimiento. Durante este paso otros científicos pueden rebatirnos y demostrar que ese animal ya era conocido o que el hombre otorgado ya se usa para otro ser.

Por último, si todo sigue apuntando a que estamos ante un descubrimiento, se remite el estudio a la Comisión Internacional de Nomenclatura Zoológica, que serán los encargados de darle caracter oficial al nombre otorgado a la especie, en el caso de que consideren que cumple con todos los requisitos.

Y así es como nacen los nombres científicos de animales.

Lista con algunos de los hombres comunes y nombres científicos de animales

http://jairoellis.blogspot.com.es/2012/07/nombres-comunes-y-cientificos-animales.html

http://www.buenastareas.com/ensayos/Nombre-Com%C3%BAn-y-Cient%C3%ADfico-De-Animales/982159.html